ACTÚA HOY
• A las 21.30
, en el teatro Alberdi (Jujuy y Crisóstomo Álvarez).

“Garota de Ipanema”, “Voce abuso” y “A felicidade” son inamovibles de su repertorio, pero además esta vez María Creuza invita a un “Concierto íntimo”. “Convoco a la intimidad de contar anécdotas que tienen que ver con determinadas canciones, y que sólo yo conozco. Quiero acercarme al público de esta nueva manera, como una conversación cantada. Además, he separado un poema de Vinicius de Moraes que voy a leer”, promete la Reina de la bossa nova, que está de vuelta en el escenario del Alberdi esta noche.

- Llevás por el mundo, entre otros, a Vinicius de Moraes, a Tom Jobim, a Dorival Caimi y salvás la valla idiomática.

- Esa es la magia. Con tanta experiencia ya tengo constatado que el portugués me lleva a que la gente entienda la cadencia, el fraseo tan particular, y eso me da mucha alegría. Logro llegar a la gente con un idioma minoritario.

- También a Caetano Veloso, a Djavan y a Ivan Lins...

- ¡Es un vasto repertorio! Elijo las canciones que más me satisfacen. Por ejemplo, hay un tema de Dorival Caimi que se llama “Dora”, acerca de una chica que se enamora en Recife (Pernambuco), y también hay temas nuevos de Bahía.

- ¿Vas a tu Bahía natal?

- De vez en cuando. Visito a mi hermana y a mis sobrinos. Este show íntimo da para comentar estas cosas, ¿me entendés?

- No parás. Estuviste en gira por España y por Líbano, cerca de zonas de conflicto...

- No quiero ni puedo parar. Fuimos con Toquinho al Festival Internacional de Música de Biblos, en Beirut, tan cerca de la zona de conflicto. Estábamos preocupados porque la gente nos entendiera, y por la vecindad, tan terrible. El mundo está convulsionado, también Brasil. Pero el momento del show es momento de paz, de escuchar una linda melodía, para ayudarnos a llevar este fardo tan pesado. Si de alguna manera yo puedo aportar un granito de arena con mi música, ya me siento feliz.

- ¿Qué más te gustaría cantar?

- Sigo descubriendo cosas nuevas. Estoy pensando si hago un disco en concierto, con piano, voz y guitarra, cantando samba de la época de Ary Barroso, de Carmen Miranda, o sea volver a las raíces. Por más que estés buscando caminos nuevos todo vuelve hacia atrás. El gran referente es el que vino antes. De repente descubrís un detalle que olvidaste o que te inspiró en algún momento y que abandonaste.

- ¿En Argentina estás como en tu casa?

- Realmente, la cercanía de la gente, la calidez, y de tantos brasileños que me siguen y que me cuentan que enseñan portugués y escuchan mis discos en el aula; es muy gratificante.

- Te acompañan Diego Weine en bajo, Esteban Blanca en batería y Víctor Vélez en piano, dirección musical (y matrimonio).

- Es el regalo que Dios me dio hace casi 40 años. Que un cordobés conquiste una bahiana. Es el marido ideal porque compartimos la música.

- ¿Y cómo es trabajar con tu marido como director musical?

- Es muy exigente, pero me respeta, y desde el principio le gusté como cantante. A partir del momento en que me abraza con esa forma de tocar, me ayuda, me inspira. Es una maravilla, para agradecer, y es un incentivo.

Vuelve a Tucumán, esta vez para ofrecer un “Concierto íntimo”, casi susurrando las inmortales creaciones de los grandes de la música brasileña. En la previa del show de esta noche habló con LA GACETA sobre la magia de cantar en portugués y sobre el disco que imagina interpretando samba de la época de Ary Barroso